Sólo por un sádico juegos de niños.~

AKAITO:
Estaba cazando, como siempre, y termine en la ciudad. Todo por una estúpida persecución, porque fui & ataque un estúpido niño de un brujo, valla~
derpente, siento que alguien me choca, no le pude ver el rostro, y fuí empujado, varios metros de él
-Aaauu... - dije, tocandome la frente donde me golpeo, abrí lentamente mis ojos carmecíes, para ver un chico bastante apuesto, vi que huía de algo, otro en aprientos he?
-Quién eres...- le dije, directamente. Me había chocado. Pero, cuando mire un poco más lejos, no veía que nada le persiguiera, pero el tenía mirada de "debo escapar"

No sabía por qué pero me daba la presencia de que la persona a la que estaba persiguiendo era inocente, debería de habérseme escapado la presa, ¿como podría haber sido tan estúpido de dejarle ir? O simplemente éste se habrá camuflado en otro tipo de aura, le joderé si es así...
Corrí detrás suya de nuevo dando pequeños saltos de impulso cada cierto tiempo, parecía que se agotaba, pero no lo entendía, ese tipo de criaturas amorfas no solían hacerlo tan rápido.
Tsk! -refunfuñó de nuevo disparando otra vez- le asustaré un poco más.

Me tomó del brazo rápidamente no tube un minuto para reaccionar, y se escucho un horrible estruendo
Entonces estaba en lo correcto, alguien lo perseguía. Sentía eso, solo, con mirarle a los ojos pude sentir eso, y más de su expreción cansada.
Entramos en un pequeño callejon, aún, sabiendo que huía, no sabía porque y como. Y quién era él?
Me toqué la frente donde me había golpeado, y vi que tenía sangre.. oh genial... me mire la mano.. Luego lo mire a él con extrema seriedad - Me responderas a la pregunta?- Le dije, me limpie la frente con un pañuelo que saque de mi bolsillo, limpiado también mi mano. Algo que odiaba, era mi propia sangre~

-Bajé al suelo, estaba harto de forzar mi espalda, y andé tranquilamente, sentía su aura, aunque no era la que yo creía, creía que esos monstruos amorfos tendrían algo más asqueroso por dentro, pero notaba algo oscuro... y también otra... era sádica, puede que me gustase ese nuevo ''amiguito''. Recobré un paso desequilibrado en el suelo con un pequeño salto intentando acostumbrarme de nuevo, a veces odiaba no andar y podría descubrirme ante algún humano, pero qué más me daba a mí, fui desterrado del cielo- Tsk.... -replicó desquiciado por aquellos idiotas- sois el infierno -replica parando su paso para mirar hacia el cielo, justo en ese momento vio caer un rayo, y éste sonrió satifactoriamente- enfadaos -ríe gracioso-

Era misterioso el chico, lo miraba como le faltaba, aquel aire. Abra corrido mucha distancia para estar así... Vi la extraña manera en que se relamio los labios cuando me limpiaba mi sangre, realmente, se sentí extraño cuando hizo aquello, pues yo veía sangre en su frente, me daban ganas de... lamerselo... pero, acabamos de conocernos, daría mucho miedo. Aparte, sentía, su aura inquieta y algo me decía que era por mi. Lo mire a los ojos -Bueno...- Dije para luegos añadir -Me llamo Akaito...-
La verdad, aquel que le perseguía, que era? sentía.. un gran poder, pero.. no se ... era.. acaso.. un angél?.. imposible...

Tks! -baja el rostro recto en su camino mientras escuchaba otro rayo- idiotas -volvió a insistir con una pequeña risa ladeando la cabeza observando las auras escondidas, le dio por avanzar un poco más sigilosamente, aunque no lo necesitaba, sentía que estaban cansados y no podrían aguantar poco más, si los hubiese querido cazar, lo habría hecho ya- ... -avanzó hasta un contenedor de basura, que escondía un callejón y subió a éste ágilmente sentándose en el borde al interior del callejón de éste- buenas noches -susurró con una pequeña sonrisa en sus labios observando a las dos manchas oscuras-

Mire como se sonrojo al escuchar mi nombre, sonreí interiormente
Callo otro rayo, sabía que pasaría algo... sentía un aura un tanto conocida, era aquel angél... era aquel ser inmortal que había visto en la playa.. Unos hermosos recuerdos se me dieron por mi mente. Entonces me gire, vi que aquel chico que me había "salvado", y noté que tenía la pierna herida, entonces me puse enfrente de el, y quede enfrente de aquel angél.
-Otra vez volvernos a vernos, eh?- dije con cierto tonito burlon, no se porque me decidi a proteger aquel, pero su aura era interesante. Mire directo a los ojos de aquel angél hermoso, realmente un ser que merecería estar en el cielo..

-Sí... - Respondí, mirandolo. -"Había jugado con él"- comenté luego, para saber cual sería el movimiento del angél, seguro una pequeña lucha, pero... seres inmortales, en una lucha eterna, no?

-ladea la cabeza apoyando sus codos a la vez sobre sus rodillas- bueno sí, podríamos decir que nos conocemos un poco -murmura desviando la mirada hacia el pelirrojo con una amplia mirada- creo que aún me queda una de tus marcas -levanta el cuello palpándolo lentamente y sonriendo al encontrar un surco en él para asentir con un pequeño suspiro-